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Ficha libro:
Título Original: Las Huellas del Tiempo / Los Mercenarios de Whutoo
Editorial: Ediciones Robel
Autor: A. Thorkent (Angel Torres Quesada)
Nº páginas: 188 págs
Precio: 5,95 €
En esta reseña les anuncié que iba a comentar las similitudes existentes entre el Orden Estelar y la serie de televisión Stargate-SG1, sin embargo en el volumen que me toca reseñar ahora ocurre un hecho fundamental en el devenir de la saga y es justo que el espacio que le dedico a hablar un poco de ciertas cosillas generales de la saga antes de meterme a reseñar las novelas aparecidas se lo dedique a la heroína Alice Cooper, el alma de esta serie que hace su primera aparición en la novela Las Huellas del Tiempo.
Las mujeres en la ciencia ficción clásica (y también en la actual, aunque en menor medida) no eran más que o meros floreros descerebrados, comparsas del héroe de turno aguardando a ser rescatadas del peligro que sea; o las femme fatales calculadoras, sensuales, frías y sin escrúpulos llenas de maldad que resultaban en ocasiones ser los personajes más interesantes de las novelas donde intervenían.
Ya en los años sesenta, con la liberación de la mujer en pleno apogeo nacieron heroínas como Barbarella, quienes no eran más que mujeres de acción que no dejaban pasar la ocasión para mostrar sus encantos o vivir aventuras de índoles eróticas.
Con Alice Cooper, Angel Torres Quesada rompió parte de los moldes de la ciencia ficción y nos brindó un personaje tridimensional poseedor de un pasado[1] que le acompañará a lo largo de la serie.
Alice no sólo demuestra ser una mujer atractiva, inteligente, valiente, decidida, con dotes de mando y algo sensual (pero sin pasarse); también es una persona normal con sus problemas familiares, laborales, sus ambiciones… Y en definitiva, alguien que en la vida real le caería bien a todo el mundo y sería algo más que una chica normal que te podrías encontrar a la vuelta de la esquina en tu barrio (donde destacaría de las demás féminas de su edad residentes en el barrio, por supuesto).
El primer episodio de este volumen, Las Huellas del Imperio podría calificarse como el episodio piloto de una serie de televisión en el que se nos presenta el escenario y los personajes que protagonizarán los siguientes episodios de la serie.
Aquí Alice es una joven de tan sólo diecinueve años de edad que ha salido de la academia del Orden Estelar con la graduación de sargento (algo que ella considera injusto, pues debería haber obtenido una mayor graduación).
En su vida personal espera volver a abrazar a su padre, un alto mando del Orden Estelar a quien le sobrevivió únicamente el cerebro tras sufrir un ataque enemigo contra la nave estelar que comandaba y que espera el momento en que pueda ser operado para que su cerebro sea insertado en un cuerpo clónico.
Mientras, en su vida profesional, Alice será destinada a un lejano planeta perteneciente a los Mundos Olvidados, situado cerca de un grupo de asteroides habitados cuyo gobierno se demuestra todavía afín al caído Imperio Galáctico, mostrándose belicoso con el Orden Estelar.
Pese a tratarse de una historia con un argumento ciertamente convencional, la maestría de Angel Torres Quesada como novelista permite crear una novela muy interesante repleta de acción, aventura, batallitas espaciales e intriga.
Poco más se puede pedir a una novela de serie B que se permite, por la caracterización de los personajes o por la cuidada narración escrita al servicio de la historia y los personajes, superar los límites de su subgénero (el de la ciencia ficción Pulp) para llegar a ser una apreciable novelita de ciencia ficción, sin importar el subgénero al que pertenezca.
En el segundo episodio, Los Mercenarios de Whutoo, Alice pierde parte de protagonismo para cedérselo a Sarken, un mercenario de origen humano al servicio de los Amos de Wuthoo (los supuestos Dioses de los humanos nacidos en Whutoo) que se dedica a combatir en sus naves espaciales a los enemigos de sus Amos, poseedores de un vasto Imperio planetario.
Sarken, tras capturar a Alice Cooper en una batalla contra una nave propiedad de los habitantes de Mirga, comenzará a descubrir la verdad sobre su pueblo y a dudar de sus ideales y de sus amos.
Poco más se puede comentar de esta novela, pues su nivel de calidad es similar al de Las Huellas del Imperio, salvo que tiene muchas similitudes con ciertos conceptos de StarGate-Sg1. Los humanos de Whutoo podrían ser los Jaffa de StarGate y los Amos de Whutoo podrían ser los Goauls de la mencionada serie de televisión.
Globalmente hablando, podría decirse que esta serie ha mejorado tras la aparición de Alice Cooper y, si antes las novelas podrían leerse de forma independiente al no tener entre ellas relación de continuidad y pertenecer únicamente a un Universo Común, ahora sí se tiene sensación de continuidad y veremos cómo novela a novela Alice Cooper irá ascendiendo en el escalafón de mando del Orden Estelar, cual será el proceso de recuperación de su padre o el aumento del poder que tendrá el Orden Estelar en la galaxia.
Como nota negativa a la cuidada edición que ha sacado Robel, hay que indicar que la edición de estilo no está muy cuidada y abundan las faltas de ortografía a lo largo del volumen e incluso en la contraportada se aprecia alguna.
Esperemos que mejoren en ese detalle, que es perdonable al comprender el endiablado ritmo de producción que les debe suponer sacar puntualmente una novela del Orden Estelar cada mes, aparte del Asimov Ciencia Ficción.
Pese a este detalle, compra recomendada para los aficionados a la buena ciencia ficción de aventuras sin pretensiones.
[1] Lo cual era un mérito en un bolsilibro, en donde abundan los personajes planos y estereotipados.
José Luis Mora
jmazarias@dreamers.es
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